Cámaras reflex, ¿por qué es tan difícil aprender a usarlas?. Estándares de interfaz de uso problemáticos.

¿Un mando a distancia donde para bajar el volumen hubiera que pulsar el botón "+"? ¿Un microondas donde para aumentar el tiempo hubiera que disminuir la cifra de la pantalla? ¿Absurdo? Es posible, pero en realidad estas paradojas no están tan lejos del funcionamiento de una cámara reflex.

Recientemente asistí al segundo nivel (tras realizar el primero) de un curso de fotografía con cámaras reflex. Para comprobar lo que habian aprendido los participantes en el primer nivel, el profesor hizo una pequeña prueba y quedó desolado. Prácticamente nadie recordaba correctamente los conceptos básicos explicados en el curso anterior.

En ese momento me pregunté dónde estaba el problema y por qué costaba tanto aprender fotografía. ¿Hace falta ser un genio para hacer buenas fotos? En realidad no, pero si hace falta mucha práctica, algo solo al alcance de profesionales o aficionados frecuentes.

El problema es que las cámaras reflex no son nada intuitivas de manejar, sus controles y escalas son contrarias a la lógica cotidiana y se basan en una serie de parámetros totalmente desconocidos para el usuario profano.

Veamos tres de esos parámetros básicos; velocidad de obturador, abertura del diafragma y profundidad de campo.

Velocidad del obturador

El velocidad de obertura del obturador, el tiempo que estará abierta la "ventana" por donde entra la luz, se suele indicar en este modo:

… 15 – 30 – 60 – 125 – 250 – 500….

Interpretación obvia:

Mayor número = Más tiempo de apertura

Esta interpretación es incorrecta, en realidad el tiempo de apertura se indica como una fracción de segundo (1/x), lo cual es matemáticamente más correcto que usar decimales, pero no instantáneamente comprendido porque además se suprime el númerador "1" y la "/" de fracción, es decir, solo se incluye el denominador.

30, es en realidad 0,0333…(periodo)

El diafragma

El indicador de abertura del diafragma, la amplitud de la "ventana" donde entra la luz, se suele indicar de este modo:

22 – 16 – 11 – 8 – 5,6 – 3,5

Interpretación obvia:

Menor número = Menor apertura del diafragma

De nuevo la interpretación más obvia es incorrecta. En realidad un menor número indica una mayor apertura de diafragma.

La profundidad de campo

La profundidad de campo indica la nitidez con que se verán algunos elementos de la fotografía respecto a otros. Por ejemplo, si se saca a la persona en primer plano y el fondo nítidos hay gran profundidad de campo, si por el contrario el fondo sale borroso, la profundidad de campo es menor.

Razonamiento para ajustar la profundidad de campo:

menor número (-)
diafragma más abierto (+)
menor profundidad de campo(-)
fondo más borroso (+)

¡¡ Al razonamiento hay que darle tres vueltas hasta llegar al objetivo real del usuario !!

Es comprensible que el usuario no recuerde el razonamiento correcto, ni los parámetros utilizados en una foto anterior para aprender de sus errores.

Intentos de resolver el problema

Una solución de los fabricantes ha sido incorporar programas automáticos a las cámaras reflex para facilitar su uso. Estos programas ajustan todos los parámetros para fotos de paisajes, primeros planos, personas con paisaje, etc. El usuario solo tiene que seleccionar el programa y apretar un botón.

El problema es que quien compra una cámara reflex realmente quiere utilizar las prestaciones de su máquina y no utilizarla como una cámara compacta.

Las cámaras compactas son la simplicidad absoluta, carecen de los controles habituales y a través de un menú de programas se ajustan estos parámetros. Sin embargo estas cámaras no son apetecibles para quienes sin ser profesionales adquieren una cámara reflex, personas que están interesadas en la fotografía y justamente por eso compran una reflex y no una compacta.

El problema es que el vocabulario cotidiano del profano no describe adecuadamente los procesos desde el punto de vista técnico y las interpretaciones de las escalas no es nada obvia.

En realidad habría redefinir toda la nomenclatura y escalas para hacer más fácil de aprender el uso de una cámara reflex. Sin embargo esto no es posible porque existen muchos profesionales y aficionados familiarizados con el sistema actual.

Conclusión

Este artículo no pretende cambiar un estándar, sino mostrar como un estándar de diseño puede ser problemático.

No se deben dar por buenos estándares de diseño solo por tradición, en muchos casos no son los mejores disponibles. Sin embargo es difícil modificar un estándar. En cada caso se debe valorar si la ganancia por la mejora justifica los problemas ocasionados a los usuarios habituados al antiguo diseño.

Comentarios de lector – Provocativo artículo, de Mantruc

Interesante artículo Eduardo, estoy de acuerdo con que el sistema de controles manuales en fotografía tiene una considerable curva de aprendizaje. Sin embargo, la fotografía es una disciplina muy antigua y sus estándares tienen una razón.

En el caso de la numeración de las velocidades de obturación, pienso que la nomenclatura usada es bastante práctica: ¿te imaginas que el dial marcara: 0.001s | 0.005s | 0.010s ? los números simplemente no cabrían en un dial pequeño y la lectura sería mucho menos usable.
La medición de las aperturas del diafragma corresponde a una relación (por eso también es inversamente proporcional) entre la distancia focal y el tamaño del diafragma (área). Al cambiar de formato de cámara (35mm / 4×4) los tamaños cambian pero los valores se mantienen, de tal manera que los fotómetros externos puedan ser usados de manera precisa para indicar los valores de velocidad/apertura. Acerca de la profundidad de campo, es sencillo "no necesitas pensar en el tamaño del diafragma" mientras menor el número (f), menor profundidad, de ocho hacia arriba ya tienes prácticamente todo a foco.

Cuesta un poco acostumbrarse a comprender estas dos variables, y la mayoría de las personas pueden lograr imágenes satisfactorias con los programas automáticos que mencionas, los controles manuales entran a jugar al momento de tomar mediciones precisas que requieren un entendimiento mayor de la fotografía para siquiera proponérselo.

Al contar ya con una cierta experiencia en la fotografía y familiaridad con las variables de apertura y velocidad, comienza a jugar uno de los elementos que realmente me agrada acerca de las cámaras reflex tradicionales: las interfaces para administrar estas dos variables. Una vez que ya te has acostumbrado, es un verdadero agrado tener el control del diafragma en una mano (anillo del lente) y la velocidad en la otra mano (dial junto al obturador), de esta forma se puede ir variando simultáneamente ambas variables para lograr la toma deseada. Mi cámara digital, en cambio, utiliza un dial único para controlar ambas variables y obliga a seleccionar alternativamente una u otra. ¡Cómo quisiera que mi cámara digital tuviera estos controles estándar*!

Para quienes pueden leer inglés y se interesen más acerca de la exposición en fotografía, ver:
http://www.photo.net/making-photographs/exposure

*Si, ya sé que existen algunas cámaras de este tipo (las SLR digitales), pero sus precios son prohibitivos.

Respuesta Eduardo Manchón

Que los estándares actuales de una cámara reflex tienen una razón de ser no justifica su diseño actual. Mostrar directamente parámetros técnicos (ópticos) a un usuario ajeno a ellos no es ningún acierto. Esto no es "diseñar", es hacer transparente la tecnología que hay debajo.

Obviamente no se podría mostar la velocidad con números porque largos decimales serían poco legibles (0,001, 0,0005..). Tampoco recomiendo ignorar el sistema actual porque eso traería muchos problemas a quienes ya lo conocen. Sugiero que se debería complementar, por ejemplo, una serie de barras crecientes la lado de la numeración actual del obturador ayudarían a comprender mejor la lógica del proceso de apertura. Las posibilidades de las pantallas LCD que actualmente tienen las cámaras reflex facilitan mucho la tarea.

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