Cómo usan los niños las páginas web

Miles de niños utilizan ya Internet en todo el mundo, y miles más harán uso de los espacios digitales en los próximos años; en España este porcentaje representa el 65% de la población infantil de entre 10 a 14 años. Esta cifra, además, va en aumento: la media de crecimiento anual ha sido del 7% desde el año 2003 (fuente Instituto Nacional de Estadística: â??Encuesta de Tecnologías de la información en los hogares 2005â?)

Teniendo en cuenta estos datos, es interesante que nos preguntemos si realmente estamos satisfaciendo las necesidades de uso y de información que requieren los pequeños de la casa y si les estamos ofreciendo soluciones adaptadas a su entorno.

Para conocer realmente cómo utilizan internet los niños, hemos conducido un test de usabilidad con alumnos de primaria de 7 a 12 años de edad, en la ciudad de Sant Cugat del VallÚs, Barcelona.

Se evaluó una web realizada por el Ayuntamiento y orientada a los niños, donde se realizaron tareas basadas en tres escenarios habituales en su día a día, como:

– â??Tu ciudadâ?: Buscar la historia de la ciudad, conocer el ayuntamiento, escribir al Alcalde.

– â??El Coleâ?: Buscar un libro recomendado por la escuela, decirle a algun amigo si te ha gustado este libro, buscar un diccionario.

– Y en un contexto más lúdico, â??Diviérteteâ?: Escribir un cuento, enviar un dibujo, encontrar ideas para un aniversario.

El objetivo de esta web es acercar y dar a conocer lo que hace el ayuntamiento a los niños, informándoles sobre las actividades dirigidas a ellos que se realizan en ciudad, su historia y el patrimonio de Sant Cugat. (URL no disponible, en fase de testeo)

Colores, sonido, dibujos� ¿Qué debe tener un diseño web para niños?

Durante la realización del test de usabilidad, nos percatamos que a los niños les resultaba más sencillo ejecutar una tarea con éxito siempre que tuviera relacionado un gráfico o una imagen de por medio, y que el texto jugaba un papel secundario si â??competíaâ? visualmente con la imagen:

En el momento de medir la facilidad de navegar por la historia, no tuvieron ningún inconveniente en hacer uso de las pestañas.

En cambio en el momento de ir hacia una de las asignaturas el elemento a clicar era la fotografía y no el texto.

Encontramos que los sonidos y el movimiento suelen gustarles bastante y les llaman mucho la atención. Su vista y el ratón se dirigen rápidamente hacia las zonas donde existen estos elementos.

â??¡¡¡Mira!!!â?Š ¡el Daniel ahora va hacia el monasterio!â? (comentario realizado al referirse a uno de los personajes de la â??Familia @rrovaâ? que aparecen en esta web).

Asocian el movimiento de algunas imágenes, sobre todo el de fotos grandes o que ocupan toda la pantalla, con el desencadenamiento de una acción. Los niños esperan que si un elemento se mueve vaya a ser clicable o haga algo, por lo que hay que ser cuidadosos en la incorporación de estos elementos e incorporarlos sólo cuando tengan asociada una acción.

Asimismo, los niños utilizan el ratón para ir siguiendo en pantalla el contenido de la página línea a línea, tal y como hacen con el dedo cuando tienen que leer un texto impreso largo. Es importante garantizar dentro de las webs dirigidas a ellos un tamaño de letra lo suficientemente grande (Arial, Verdana o Comic a partir de 11 puntos), para no dificultar la lectura con el puntero y facilitar su seguimiento.

Además, es importante no emplear tecnicismos. Muchas palabras que un adulto interpreta de forma sencilla confunden a los más pequeños, provocándoles miedo a equivocarse.

Un claro ejemplo fue el link para comentarios, titulado â??Un espacio para tus sugerenciasâ?â?Š cuando podría en su lenguaje podría llamarse: â?Dinos que piensasâ?.

¿Cómo utilizan la página?

Los niños navegan por las páginas siguiendo la estructura de navegación (no hacen saltos por la página, van ordenadamente a la sección 1, después a las subsecciones, etc.) y sin explorar contenidos de apoyo o información adicional a la página (columna de la derecha).

Encontramos que no prestan atención a los banners estáticos y el contenido relacionado que no se encuentra en el mismo campo visual de la navegación principal, por lo que para llamar su atención y que esta información no pase inadvertida, es mejor situarla en la misma columna o barra.

Un hallazgo destacado del estudio ha sido observar que los niños no ven lo que hay por debajo de la pantalla. Cuando se encuentran leyendo un contenido o viendo una imagen, suelen manifestar su molestia por tener que suspender la lectura o por no poder ver el dibujo completo diciendo: â??¡Se ha cortado la página!â?. Esta situación se origina por la falta de experiencia en el medio digital y por el hecho de que no saben utilizar la barra de scroll.

Asimismo, en las pocas ocasiones en que nos hemos encontrado con que el niño sabía utilizar el scroll, todo el contenido por debajo de la pantalla le resultaba invisible: ninguna tarea resultó exitosa cuando se había de buscar la información por debajo de la pantalla principal.

A medida que la experiencia de estos usuarios vaya en aumento, podrán ir utilizando poco a poco las herramientas estándares de los navegadores. Pero en edades tan tempranas el diseño de las webs dirigidas a niños funcionaría mejor si se realizase pensando en que el contenido ocupe únicamente la zona principal de la pantalla, sin tener que hacer scroll.

¿Qué les parecen los contenidos avanzados?

Aunque se ha hablado mucho de la gran facilidad con que los niños aprenden una nueva tecnología, es cierto que sin unas indicaciones correctas es difícil que puedan utilizarla de forma correcta. La redacción de unas buenas instrucciones, sin palabras complicadas ni tecnicismos, resulta básica para que el aprendizaje les represente un proceso espontáneo y se inicien en su uso de forma habitual.

En el test de usabilidad hemos podido evaluar algunas funcionalidades más complejas como â??enviar a un amigoâ?, â??opinar sobre un libroâ? o â??escribir al Alcaldeâ?. En esas ocasiones nos hemos percatado que a los niños les cuesta mucho comprender estos conceptos, y que tan sólo vez se les has explicado en qué consiste cada funcionalidad de forma natural y haciendo paralelismos con su día a día, pudieron completar la tarea.

Conclusiones

Conocer y evaluar conjuntamente con niños una web nos ha permitido mejorar su diseño y hacer que cumpla con sus expectativas, además de garantizar que tenga contenidos interesantes para ellos.

La co-creación con niños en el diseño de webs es un terreno por explorar; conocer y descubrir su mundo nos permitirá orientar el aprendizaje generado para reinventar nuevas formas de interacción con el usuario.

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