Consejos cuando no hay que dar consejos a una startup

1. Intenta apuntar a mercados globales desde un inicio
Puede ser que tu alcance inicialmente sea local o nacional, pero piensa en que tu proyecto pueda ser global desde el día 1. Basar tu modelo de negocio en el "arroz" es mejor que basarlo en la "paella". El arroz es global, la paella es local.

2. El equipo debe ser mayoritariamente técnico
Sin ánimo de ofender pero gente con buenas ideas hay mucha, gente que sabe programar bien no. Es un tema de oferta y demanda. Buenos programadores a los que les apasione su trabajo hay muy pocos. Si eres programador se generoso y ábrete a gente que sabe de usabilidad, marketing, etc.. Si eres un equipo con una buena idea, se muy muy generoso y mete en el equipo a técnicos que hagan realidad tu idea.

3. Desarrolla un proyecto enseñable
La demo es esencial y debe ser real. El pitch está muy bien, pero más importante es tener detrás un producto que te soporte. Si das un buen pitch sin nada detrás quedarás como un gilipollas. Si tienes un producto con fundamento será cuestión de tiempo dar con la puerta correcta. No desesperes. Tendrás que llamar a 1000 puertas, pero al final lo conseguirás. Pero es muy importante tener un producto genial.

4. Enseña tu producto todo lo que puedas
Una vez que tengas tu demo, ve a todos los sitios posibles y enseña tu producto. Esto es por lo que necesitas un equipo. Uno tiene que estar enseñando el producto, recogiendo feedback y convirtiendo ese feedback en mejoras del producto y el otro tiene que estar desarrollando. De esa forma avanzas. Si cuando vas a hacer una demo, la gente no entiende tu producto, no lo tomes como algo negativo, solo estás recibiendo ideas sobre como mejorar el producto. Nunca pienses que un mal comentario es de alguien "que no se entera". Piensa en como puedes convertir ese comentario negativo en una funcionalidad para convencer a ese usuario.

5. Para no quemar clientes, ve de menos a más
Ir a clientes importantes el día 0 es arriesgado. El día 0 haz la demo con amigos y familia. No te darán críticas, pero si no despiertas entusiasmo, revisa tu proyecto. Si consegues que tu familia te haga la ola, ve a por el siguiente peldaño. Pequeñas empresas, pequeños clientes. Dales el producto gratis. Si se quedan contentos te recomendarán y no hay nada mejor que eso. Ve a por el siguiente peldaño con mejoras y nuevas funcionalidades. Ganar clientes debe ser como pasar niveles en el Call of Duty.

6. Haz la demo muy sencilla
Tu demo se debe comprender en 30 segundos. Si no, no funciona. Si tu idea es muy buena pero requiere de 10 minutos de explicación no sirve. El elevator pitch no es un mito, es una realidad. Si estás en una feria, o en un encuentro con inversores, seguramente tengas 30 segundos para convencer a alguien de que te escuche. Con Docxpresso fuimos a una feria en Hannover (CEBIT) había gente que se acercaba al stand a curiosear, le preguntaba si querían más información y por defecto me decían que no. Les enseñaba mi móvil y les decía, "mira, este formulario que ves aquí lo he hecho con un documento de word". Esa frase, solía ser suficiente para captar su atención. Luego ya preguntaban y como lo haces… ese es tu elevator pitch.

7. Ser startup quiere decir que eres disruptivo
Un aspecto importante de ser una startup es que quieres romper el mercado. No pienses como un empresario. Piensa como alguien que quiere hacer de este mundo un sitio mejor. Eres tu contra ellos. El sistema establecido contra ti. Regala tu software, hazlo accesible a todo el mundo, hazlo open source… haz que los poderosos se sientan amenazados. Tu aun no eres parte del sistema. Tienes la oportunidad de romperlo. Es tu momento. Disfruta haciéndolo. No te ahogues en el día a día o en el margen operativo. Eso es para los empresarios. Tu eres un emprendedor.

8. Nadie dijo que sería fácil
Durante un tiempo tendrás que olvidarte de todo y solo vivir y respirar para esto. Puede ser que salga bien o mal, pero pase lo que pase, lo que habrás aprendido se quedará contigo para siempre.

Deja un comentario