La marca que el público ama, no es RTVE
Quizás el objetivo del rediseño de RTVE es que la gente se enamore del ente. Pero si ese fuera el objetivo, el primer paso tendría que haber sido un cambio de nombre. RTVE no es un nombre del que nadie se vaya a enamorar jamás. No suena como la BBC, no suena como NBC, no suena como ABC. Suena fatal y eso para un nombre es la tumba.
Al final, las marcas que la gente realmente quiere, se han ejecutado de mala gana
En este rediseño se ha puesto tanto empeño en hacer algo digno con un nombre tan malo como RTVE, que según han ido bajando en la arquitectura, RTVE > TVE + RNE > etc…, se han ido quedando sin energías y las marcas que conectan con la gente se han ejecutado de mala gana.
El logotipo de la 1 y el de la 2 han pasado de ser iconos del diseño español (la 2 creo que ha sido uno de esos logos que capturó toda una filosofía) a piezas dentro de un puzzle que el espectador sencillamente desconoce.
Identidad corporativa mal pensada
El esquema de arquitectura de marca que presenta Summa en su blog, demuesta lo alejado que quedan de la cumbre las marcas que están en contacto con los espectadores.
La 1 y la 2 (cadenas líderes nacionales) se ven mezcladas al mismo nivel que 24h o TDP (canales temásticos). Está claro que si nadie en RTVE puso el grito en el cielo al ver este esquema de arquitectura de marca, es que nadie estaba pensando en el espectador. Estarían pensando en lo bonito que quedarían las oficinas, el edificio corporativo o los camiones.
Pero, ¿y los espectadores?
Evidentemente, si RTVE quiere ser la BBC española, debería pensar un poco más en sus espectadores y un poco menos en su organigrama corporativo.