También se va extendiendo el uso de herramientas de revisión de la accesibilidad, pero eso támpoco lo es. Veremos un ejemplo de cómo puede crearse una página que aplique los estándares y al ser revisada automáticamente pase incluso el más alto nivel y, sin embargo, sea de lo más inaccesible para muchos usuarios.
La conciencia de la importancia de utilizar los estándares en la creación de páginas web está expandiéndose y beneficiando indirectamente a la accesibilidad de la Web. Pero ésto no es suficiente, estándares no es directamente igual a accesibilidad.
Si bien, debemos agradecer a todos los que están difundiendo la aplicación de los estándares el que poco a poco vayan desapareciendo esa horrible costumbre de utilizar tablas para maquetar o disponer el contenido. ¡Gracias, fanáticos de los estándares!.
Por otra parte, se extiende también el uso de aplicaciones para la revisión automática de la accesibilidad, incluso se generan estudios, en ocasiones pagados con fondos públicos, que se limitan a su uso. Pero cualquiera que tenga un conocimiento más o menos fundado de lo que significa la accesibilidad sabe que dichas aplicaciones son ayudas para el webmaster pero no un indicador del nivel de accesibilidad. Bueno, vale, pueden valer para identificar que una página no llega ni siquiera a cumplir con el nivel más mÃnimo, casà dirÃa rácano, de accesibilidad, el nivel A.
Lamentablemente, se ha extendido también la idea de que la participación de los usuarios es algo descubierto por algún gurú de la usabilidad, y que quienes trabajan en accesibilidad se limitan a hacer una revisón técnica.
Esto no es asà y no lo ha sido nunca. Precisamente quienes trabajamos por la accesibilidad somos, hemos sido y seremos, siempre conscientes y los primeros valedores de la importancia de hacer pruebas de diseño con usuarios y revisar la accesibilidad con su ayuda.
Una clara demostración de que aplicar los estándares no es suficiente, y de que revisar únicamente con una herramienta o aplicación de revisión automática de la accesibilidad no basta, me la ha servido en bandeja MartÃn Baldassarre, Co-coordinador del Grupo de Interés en Herramientas (G1) del Seminario Iberoamericano de Discapacidad y Accesibilidad en la Red (SIDAR), quien me puso en la pista de uno de los estilos creados para csszengarden, cuyo autor, conscientemente, ha creado una presentación del contenido cómica e inaccesible, pero que aplica correctamente los estándares de XHTML 1.0 Strict y de CSS.
Se trata del estilo "Geocities 1996", creado por Bruce Lawson. La página aplica correctamente, como he dicho, los estándares de marcado e incluso pasa la revisión con Bobby y, lamentablemente, también con TAW. De ello, alguien inexperto deducirÃa que esa página es plenamente accesible.
Evidentemente esto no es asÃ. Los más avezados habrán hecho una revisión de esta página con otras herramientas de revisión que son capaces de detectar automáticamente un fallo: Una serie de enlaces adyacentes sin separar, precisamente los que indican la conformidad con estándares y nivel de accesibilidad.
Herramientas como CynthiaSays y la versión beta de HERA 2.0 lo detectan. (He pedido a su autor que separe esos enlaces con un caractér imprimible pero invisible, para que ninguna herramienta de revisión automática pueda detectar ningún fallo pero que siga estando igualmente mal).
Pero más importante aún es comprender, darse cuenta, de que independientemente de ese fallo hay muchos otros, indetectables automáticamente, pero que crean un montón de barreras para muchos grupos de usuarios. Son evidentes, la falta de legibilidad, la carencia de texto alternativos para las imágenes, el uso de imágenes en vez de marcado, los textos destelleantes y en movimiento, las animaciones que distraen y no pueden detenerse, los elementos coloreados con bajo contraste, la necesidad de utilizar la barra de desplazamiento lateral y vertical, etc., etc., etc. ¡Menos mal que la presentación y disposición de los contenidos se basa única y exclusivamente en la aplicación de una hoja de estilos!. AsÃ, podemos desactivarla y llegar a poder acceder a su contenido.
¿Un buen ejemplo, verdad?.