Cuando gestionas equipos y personas debes intentar que tus comentarios sean en positivo. No se trata de ser falso de lo que se trata es de evitar la crítica negativa. Aquí te damos un Check-list para que puedas organizar tus sesiones con tu equipo y que el feedback sea positivo.
Toma notas de los temas que quieras comentar con tu equipo y procura poner ejemplos claros y objetivos que podáis comentar. En una sesión de Feedback debes intentar tratar temas concretos que los dos podáis compartir. La sesión de Feedback hay que intentar llevarlas a una sesión de trabajo constructiva. Donde ambas partes podéis compartir experiencias y proyectos como referencia de casos de éxito y los casos negativos como caso de aprendizaje.
Esta sesión puede ser una reunión mensual / semanal de una hora de duración en la que tanto tú como la persona de tu equipo podáis compartir notas sobre tareas o proyectos realizados en los que intercambiáis opiniones. Muy importante no criticar, sencillamente compartir éxitos y fracasos para aprender y mejorar.
La sesión de feedback debe contener muchas preguntas tuyas y pocas afirmaciones o sentencias por tu parte. Las preguntas siempre deben ser preguntas abiertas. Intenta que tus preguntas siempre empiezan por como, cuando, donde, por qué…
Este tipo de preguntas obligan a la otra parte y a desarrollar una respuesta evitando el sí o el no. Si preguntamos a nuestro equipo si han hablado con el cliente x, la respuesta puede ser bien, mal, no lo sé… Mientras que si preguntamos “Por qué el cliente X está tan contento” o “como ha ido la llamada con el cliente X” la respuesta de una forma necesitará un poco más de desarrollo.
Para desarrollar esta parte de Feedback siempre podemos utilizar la respuesta para articular una siguiente pregunta. Si nuestro equipo nos dice que Cliente X está muy contento porque hemos encajado en el precio deberíamos desarrollar más preguntas sobre qué nos parece nuestra política de precios, o que cambiarías en la política de precios, o qué te parecen los descuentos que estamos aplicando.
Evidentemente si algo sale mal, lo debes comentar rápidamente con la persona que lo haya realizado y sea responsable, pero más que reprochar el error, primero tú debes asumir la responsabilidad del mismo y tú debe ser capaz de proponer soluciones y compartirlas con esa persona para ver si tus ideas junto a la suyas realmente pueden suponer una mejora y una resolución del problema. Por otro lado puede ser que si es un problema que va más allá del ámbito de trabajo de esa persona no tengas que compartir en una reunión de Feedback con todo tu equipo.
Con tu equipo lo que debes intentar es que una reunión de Feedback se convierta en una reunión de aprendizaje. Es esencial que tu equipo te de comentarios y nuevas ideas sobre el proyecto. Cómo mejorar la argumentación con un cliente, como responder a objeciones, cómo conseguir que los clientes realmente entiendan nuestros beneficios. Y de tu equipo tienes que ser capaz de extraer información de valor y tu equipoTiene que tener la confianza para hablar contigo de una forma abierta y relajada.
Si la reuniones de Feedback se convierten en críticas tuyas a tu equipo ese feedback esencial para que tu proyecto mejore lo vas a perder.
La reuniones de Feedback son esenciales para que tu equipo mejore. Ya sea porque eres el responsable máximo de la empresa, o eres responsable de un equipo o eres responsable de una parte del producto, sea cual sea tu función es esencial disponer de canales de Feedback del equipo interno.
Y las mejores herramientas para que se feedback no se convierta en sesiones destructivas, es emplear estas técnicas que hemos comentado. Tomar notas y compartirlas con el equipo. Siempre preguntar más que compartir. Y por último ser ágil en el caso de que haya críticas o problemas. Supongamos que lanzas una nueva funcionalidad dentro de tu herramienta y el equipo se queja de la misma. Cuanto antes revisa qué es lo que necesitan, coméntalo de una forma clara sobre que se quiere conseguir y define. Evita que la crítica se quede sin resolver. Asume la responsabilidad de una forma clara y sin esconder el problema, pero articula una solución clara y lógica para todos. Antes de dar siguientes pasos, valida la solución. Una vez validada, implementa y vuelve a generar el feedback que necesitas.